El nueve de Junio del presente año, los estudiantes y entusiastas de la Ciencia recibieron un fuerte golpe. Y es que ha cerrado uno de los sitios más importantes para aquellos que no pueden costearse las millonarias licencias de acceso a las revistas científicas del mundo. Ha caído el proyecto "Library Genesis". Pero ¿qué diantres era eso? Era un proyecto mediante el cual se podía tener acceso gratuito a libros, artículos científicos y otra literatura especializada en materia de Ciencia.
Así lucía la página de donde millones de personas interesadas en ciencia podían acceder a artículos y libros que no podían costearse.
Los principales afectados fueron los estudiantes de Universidades que no pueden costearse las suscripciones millonarias que solicitan las casas editoriales de revistas científicas como Nature, AAAS, Elsevier, Springer, etc. Las regiones del mundo que más han sentido esto son América Latina y Asia, sitios con países en vías de desarrollo. Todo empezó el 6 de marzo de este año cuando la casa editorial Elsevier presentó en una corte de Nueva York una petición para remover la página de "Library Genesis" argumentando que habían tenido pérdidas por millones de dólares. Y desde la semana pasada la página ha cerrado sus puertas y no está disponible.
Así luce ahora (desde google chrome) la página de Library Genesis. Una verdadera pérdida para los que no pueden pagar cantidades exorbitantes por un archivo digital.
Esto alza los fuegos del debate entre los que defienden que las revistas pueden cobrar cargos obscenos por ver/bajar el PDF de un artículo científico y aquellos que defienden que la ciencia no debería estar disponible sólo para los que la puedan comprar. Un servidor cree que las opciones de Open Access son lo ideal, en éste tipo de modalidad es el que quiere publicar el que paga, no el que puede leer la información. Aunque claro, este sistema tiene también fallas que son discutibles.
¿Así que quiere leer un poco de ciencia? No tan rápido pequeño... Primero paga 31.5 dólares estadounidenses para poder hacerlo (en México eso es aproximadamente 485 pesos... o el estudiante paga su transporte público ese mes o lee UN artículo).
Por ahora nos quedamos sin un aporte gigante de información, esperemos que con el tiempo las predatoriales editoriales se inclinen por modelos que favorezcan el intercambio de información científica y dejen de ver a la ciencia como un negocio multimillonario.
PS. Si quieren leer el documento que interpuso Elsevier ante las cortes pueden hacer clic aquí.
Una imagen vale mas que mil palabras.
ResponderEliminarhttp://www.izaping.com/wp-content/uploads/2015/04/tumblr_nmfc21T1tL1r8weq9o1_500.jpg
En efecto.
EliminarFFFFUUUUU! (ya se me ha jodio el día)
ResponderEliminar...
Lo más, ejem, "gracioso" del asunto es que todo artículo de toda revista ha sido costeado por los autores del mismo: muestreo, experimentación, análisis de los datos, toma de imágenes, construcción de modelos, redacción, traducción... y la revisión por pares también es gratuita. Y las imágenes en color las pagas tú. Además de que eres tú el que adaptas tu artículo al formato de su revista, por lo que ya lo presentas casi-casi maquetado salvo por cuatro tontadas. Y encima ¡encima!, si quieres publicar en Open muchas veces hay que pagar lo impagable (o lo que no te puedes permitir, mejor dicho)... u_u
Realmente creo que la monstruosidad que se ha construido entorno a las revistas debería de desaparecer... Por mí Elsevier y Blackwell, entre otros, podrían irse al abismo de la bancarrota. Total, ya que los autores hacemos todo el puñetero trabajo y la revisión también la hacemos "de grati"... ¿qué mas da sustituir esas aberraciones por entidades sin ánimo de lucro? Además, con internet todo eso es más fácil.
Hola
EliminarConcuerdo plenamente en toooooodo lo que comenta.
Y es precisamente "por joder" a esas mafias que yo SÍ uso (o usaba) este tipo de portales.
SALUDOS
Ese incomodo momento, en el que el conocimiento no es libre...
ResponderEliminarHola.
EliminarIncomodísimo, pues es bien sabido que la ciencia y su publicación es un negocio... Algo triste, pero cierto.
Saludos.