martes, 1 de septiembre de 2015

Lo bueno y lo malo 4

Bienvenidos de nuevo a este tipo de entradas donde hago una crítica constructiva de una pieza de ilustración paleontológica con el motivo de aprender y divertirnos. En ningún momento considero que la obra sea mala o que deba desecharse, si esta aquí es porque aporta algo al conocimiento de forma gráfica y agradable. Así que comencemos.

Artista: RJ Palmer "arvalis".

Obra:

La obra en cuestión, diseñada para el juego Saurian. En este enlace pueden verla más grande y descargarla.


¿Qué especie estamos viendo? Tyrannosaurus rex, el más famoso de todos los dinosaurios.

Lo bueno:
  • Tiene plumas y contribuye a generar una idea más moderna de los dinosaurios, una acorde a la evidencia.
  • Tiene integumento oral y no anda con los dientes expuestos.
  • Tiene buenas proporciones.
  • Al fin, un ilustrador sin las urgentes ganas de enseñar brazos humanoides en un T. rex.
  • Los pies tienen una buena cobertura de tegumento, no más pies de pollito y pajarito.
  • Nada de cuernos de vaca brillosos y cornudos, sino que tiene partes queratinizadas, una maravilla.


Lo malo:
  • Los ojos quizá sean demasiado pequeños (pero en este punto yo podría estar completamente errado).
  • Tiene plumas en etapa 2 y 3, cuando los tiranosauroides sólo tienen evidencia de la etapa 1. ACTUALIZACIÓN. Hay evidencias que sugieren que Dilong tuvo plumas de etapa II, eso indica que pueden existir plumas con filamentos múltiples emergiendo de un punto común, pero no existiría un cañón ni un vexilo.
  • Tiene alas (pennibrachia), cuando en realidad esa condición sólo aparece en Maniraptoriformes como Ornithomimosauria, Oviraptorosauria y Paraves. ACTUALIZACIÓN. Tal parece ser que las plumas del brazo de esta representación son alargadas y no representan pennibrachia. Pero aún hay zonas con plumas en etapa III, lo que no está apoyado por la evidencia.
  • Tiene escamas escutadas en las patas traseras, pero no hay evidencia de ellas en el dorso de los dedos. Concavenator tiene este tipo de escama, pero sólo la región del metatarso. Usar a Parahesperornis como ejemplo es muy arriesgado, es como querer que los animales como Ophiacodon tengan pelos sólo porque un ornitorrinco los tiene (además el fósil de Parahesperornis sólo tiene escamas escutadas en el metatarso, no en los dedos).
  • Típico meme de vientre y otras zonas calvas. No hay evidencia de ello en los dinosaurios emplumados no avianos, hasta ahora no ha aparecido un sólo dinosaurio con esta configuración. Por lo tanto, es altamente especulativa. Se ha sugerido esta configuración porque se asume que los dinosaurios como este 1 eran endotermos y 2 no tenían mecanismos para disipar el calor. Y sabemos que 1 es probable que hayan sido mesotermos y 2 en realidad contaban con muchos mecanismos para disipar calor tales como: la forma de respirar (circulación doble), la presencia de sacos aéreos, la posesión de una gran superficie corporal en relación a la masa y que las plumas no son iguales a los pelos, ellas si permiten que el ave no se recaliente.
  • La textura de las escamas no se corresponde con las escamas que presenta como fotos. Si bien no se sobrelapan en el dibujo, todas son ovales (cual bacilo bacteriano) y las escamas reticuladas no tenían esta forma, eran más redondeadas a hexagonales.
  • Las impresiones de piel de la cola se conocen sólo en BHI 6230 (Wyrex) y dichas impresiones se ubican en la parte ventral/lateral de la cola. Hacer una cola completamente calva es por lo tanto un error. Además de que no se ha hecho análisis tafonómico alguno, por lo que no sabemos si en realidad esta zona sería calva o si las plumas se perdieron. A diferencia de Kulindadromeus, donde existe coexistencia de plumas y escamas, T. rex no se encuentra preservado en sedimentos así de finos (de sedimentos lacustres), por lo que de existir las plumas es poco probable que se encuentren asociadas al esqueleto. 
  • Detalle minúsculo: parece que al autor se le olvidó colocar el dedo I de las patas traseras, mismo que pueden ver en este montaje esquelético. ACTUALIZACIÓN. Si bien, en esta reconstrucción no hay dedo I, éste si aparece en el modelo 3D que puedes ver haciendo clic aquí.


Conclusión:
Este T. rex es una obra muy buena y sin duda de las pocas que toman y hacen uso de la nueva imagen de los dinosaurios. Pero como toda obra conceptual de videojuego, es sujeto de cambios para hacerla más atractiva y recordemos que no fue hecha para complacer a los científicos, sino a los potenciales compradores del juego. ACTUALIZACIÓN. De nuevo, tal parece existir la impresión de que este es un post que demerita la obra de R. J. Palmer y no es el caso (la obra me gusta). El punto es enriquecer nuestros conocimientos sobre los dinosaurios y no quedarnos con cualquier cosa que nos den.


Referencias:
Larson, P. L., & Carpenter, K. (2008). Tyrannosaurus rex, the tyrant king. Indiana University Press.

Godefroit, P., Sinitsa, S. M., Dhouailly, D., Bolotsky, Y. L., Sizov, A. V., McNamara, M. E., ... & Spagna, P. (2014). A Jurassic ornithischian dinosaur from Siberia with both feathers and scales. Science, 345(6195), 451-455.

Cuesta, E., Díaz-Martínez, I., Ortega, F., & Sanz, J. L. (2015). Did all theropods have chicken-like feet? First evidence of a non-avian dinosaur podotheca. Cretaceous Research, 56, 53-59.

Williston, S. W. (1896). On the dermal covering of Hesperornis. Kansas University Quarterly, 5(1), 53-54.


ACTUALIZACIÓN:

Se argumentó en los comentarios que la cola con plumas sería igual de especulativa que una cola sin ellas. Eso no es cierto, la inferencia de horquillado filogenético y el método científico nos indican que debemos buscar muestras de integumento caudal en parientes próximos. Y precisamente, los parientes de T. rex muestran colas con plumas.

Dilong paradoxus según aparece en "Xu, X., Norell, M. A., Kuang, X., Wang, X., Zhao, Q., & Jia, C. (2004). Basal tyrannosauroids from China and evidence for protofeathers in tyrannosauroids. Nature, 431(7009), 680-684." Noten las plumas de la cola, desafortunadamente no figura una foto de esta zona. Pero eso nos lo resuelve el siguiente tiranosauroide.

Fragmento de cola de Yutyrannus huali según aparece en "Xu, X., Wang, K., Zhang, K., Ma, Q., Xing, L., Sullivan, C., ... & Wang, S. (2012). A gigantic feathered dinosaur from the Lower Cretaceous of China. Nature, 484(7392), 92-95.". Noten también que hay impresiones de plumas tanto en la parte dorsal como ventral de la cola.



domingo, 30 de agosto de 2015

¿Tiene el Dimetrodon una nueva imagen?

Desde hace un rato circula en la red un rumor de que el archifamoso Dimetrodon tiene una nueva imagen y que en esencia, su icónica vela no estaría cubierta del todo y tendría las puntas desnudas. Esta nueva imagen ha sido rápidamente duplicada por ilustradores de forma casi memética, veamos.

Esta es la imagen más usada por los dispersores de la "nueva imagen", pero en realidad es bastante especulativa. Ilustración de DG; Nic traheripteryx.

En los foros y los sitios de noticias también se presenta esta reconstrucción como la "nueva imagen" de los Dimetrodon. Ilustración de DG; Nic traheripteryx.

Esta otra imagen tampoco está basada en estudio científico alguno. Es un fanart de algún tipo de parque. Ilustración de Robinson Kunz.

Aterradoramente similar a la reconstrucción de traheripteryx, llega esta obra de "Arcovenator", inspirada en un video.

Esta reconstrucción de parte de AntoninJury también hace mención a un video, el mismo que fue fuente de inspiración de la reconstrucción anterior.

Este video contiene bastante información buena, pero también contiene información errónea y desgraciadamente la información errónea es la que se filtró a todos lados.

Y es que en el video vemos que el autor menciona que "un nuevo estudio del 2015" demostró que la vela no llegaba hasta la punta de las espinas. Pero eso simplemente no es cierto. Para empezar, el estudio no es de hace unos meses, es de hace varios años, específicamente, del 2012.

Resumen del trabajo del 2012 al que se hace referencia en el video (puedes ver el trabajo haciendo clic aquí). Sabiendo que el estudio es del 2012 y no del 2015, cualquier persona cuerda no tomaría tan en serio las conclusiones de un video de youtube, pero al parecer la cordura no es lo de hoy.

En dicho estudio los autores concluyen muchas cosas interesantes, pero antes de escupirlas hay que entender que el estudio se condujo con siete espinas de la especie Dimetrodon giganhomogenes. Y una especie no es lo mismo que las al menos 12 especies de Dimetrodon descritas a la fecha y mucho menos la cantidad de espinas conocidas para todo el género.

Ilustración de 2006 de D. giganhomogenes. El autor es Dmitry Bogdanov.

Con esto en mente, prosigamos. Si prestamos atención al título ("Fracturas sanadas en las espinas neurales de un esqueleto asociado de Dimetrodon: Implicaciones para la morfología y función de la vela dorsal"), el trabajo es sobre un espécimen patológico (o sea uno enfermo y no uno "normal"), específicamente el FMNH UC 1134. A este espécimen se le examinó a detalle y se le hicieron cortes para apreciar los tejidos óseos de las espinas de la "vela". En el estudio, los autores sugieren que en donde se presentan anormalidades es posible que la continuidad de la vela se haya visto interrumpida a tan solo 4 a 8 cm del lomo. Pero de nuevo, es en un espécimen patológico, uno enfermo y el objetivo principal del trabajo es precisamente ese, describir un espécimen patológico. 

Estas son las espinas neurales del espécimen (FMNH UC 1134) enfermo que sufrió fracturas (indicadas por las flechas blancas) que sanaron. Imagen tomada de Rega et al. 2012.

La mayoría no leyó ese "detallito" en el artículo ya sea porque no lo pudieron conseguir o porque se les pasó completamente (u otra razón desconocida). Y podrán clamar que el resumen del artículo dice "Furthermore, the distal morphology of spines in more complete specimens, including the type fmnh UC 112 and omnh 01727, suggests that the dorsal margin of the sail was located well proximal to the tips of the elongate neural spines." (Además, la morfología distal de las espinas en especímenes más completos, incluyendo al espécimen tipo FMNH UC 112 y el OMNH 01727, sugieren que el margen dorsal de la vela estaba localizado de forma proximal a las puntas de las espinas neurales alargadas). Como pueden leer, la vela de otros D. giganhomogenes sería incompleta y mostraría una vela irrumpida por puntas "libres". Muchos sacaron de contexto esa frase del resumen y confundieron términos, pensando que se refería a la parte proximal (más cercana al cuerpo) de la espina, pero los autores se refieren a la zona adyacente a las puntas. Y ahora muchos andan dibujando dimetrodontes enfermos, con velas rotas como si éstos representaran a todos los dimetrodontes que vivieron.

Don FMNH UC 1134 estaba deformado por alguna lesión hasta la base de la vela, pero esta foto es del espécimen tipo de D. giganhomogenes (FMNH UC 112), que sólo presenta deformación en la punta de las espinas y no en su base. Imagen tomada de Rega et al. 2012.

Y nosotros los simples mortales que no podemos ir y cortar espinas de Dimetrodon a diestra y siniestra para poder saber hasta dónde se extendía la vela ¿cómo le hacemos? Más o menos simple: las espinas que tienen patologías presentan "bultos" y formas retorcidas, pero las espinas sanas no. De esta forma podemos guiarnos de forma empírica para saber con cierta precisión hasta dónde poner la vela.

Foto de Dimetrodon incisivum por H. Zell. Aquí podemos ver que hay algunos abultamientos raros en la vela. Aunque podemos asignarlos a signos de fractura, debemos ser cautos porque puede ser que se hayan roto cuando se fosilizaron o por razones ajenas a una patología.

Otro espécimen de D. incisivum (foto de Daderot). Aquí podemos ver que sus espinas no presentan muchas alteraciones. Algunas están dobladas en la punta, sugiriendo una vela rara en esa parte.

Entonces, si sólo entraste a ver el asunto de si tenían la vela completa o no, la respuesta es: casi completa, pero habían individuos con patologías que impedían que la vela estuviera completa. Ahora, si te quieres quedar, aún hay cosas nuevas. Los autores del estudio de 2012 sugieren una serie de conclusiones interesantes (de hecho la parte más interesante de su trabajo apenas viene).

1) Los autores indican que no encontraron evidencia alguna de vasos sanguíneos en la superficie externa de las espinas, lo que indica que la función termorreguladora (usar la vela como calefactor) está fuera de las posibilidades. Esta misma hipótesis fue propuesta en 2014 (clic aquí para ver e ir a "Ojos para la noche") cuando se estudiaron los ojos de muchos animales, entre ellos los de Dimetrodon y se concluyó que posiblemente eran animales nocturnos, por lo que la vela sería completamente inútil para calentarse.

La histología en el 2012 nos dijo que la vela no tenía funciones termorreguladoras y en 2014, los ojos nos dijeron que vivían de noche. Mucho ha cambiado con Dimetrodon, sólo que no precisamente en la extensión de la vela. Reconstrucción de Marlene Hill Donnelly.

2) Siguiendo con la vela, los autores del estudio no encontraron evidencia de fibras de Sharpey en las espinas. ¿Y eso qué? Bueno, que eso indica algo sobre la naturaleza de la vela. Ésta no tendría tendones ni músculos, sino que estaría cubierta por tejido más simple. Esto puesto que las fibras de Sharpey delatan la presencia de músculo y tendones unidos al hueso.

El camaleón crestado (Trioceros cristatus) es un buen modelo para la vela del Dimetrodon, pues no tiene tendones o músculos en la parte alta de su vela y ésta sólo se recubre por piel.

Vela de un camaleón crestado aclarada y teñida posteriormente. En ella podemos apreciar los huesos homólogos a las espinas de Dimetrodon en rojo y los tendones que la mantienen rígida (indicados con las letras te). Noten cómo la parte alta no tiene tendones (i.e. no tiene fibras de Sharpey). Imagen tomada de Ibrahim et al. 2014. Barra de escala a 1cm.

3) ¿Pero qué tipo de tejido simple? Aquí es donde se pone más interesante. Los autores sugieren que podría haber estado cubierta por una red gruesa de colágeno, tal y como se observa en la aleta dorsal de algunos peces como el atún. Esto traería ventajas como el impedir que el cuerpo ondulara de arriba a abajo y en su lugar, sólo ondulara de lado a lado, mejorando con ello la locomoción del animal.

Acercamiento de la aleta dorsal del atún aleta amarilla (Thunnus albacares) que está soportada no por espinas neurales, sino por los radios de dicha aleta.

4) Finalmente algo de relevancia taxonómica muy interesante. Resulta que en el pasado se sugirió que las especies de Dimetrodon se podían identificar por la sección transversal de sus espinas dorsales. Esto es, especies diferentes tenían espinas con formas diferentes. Pero resulta que los autores del estudio de 2012 encontraron que eso era falso. De tal manera que no, los dimetrodontes no se distinguen por la forma de sus espinas dorsales.

Habrá que acercarse más a los dimetrodontes para saber cuáles eran sus características diagnósticas como este buen hombre que hace la danza del dimetrodonte feliz para poder obtener esa información valiosa.

Bueno, volviendo al tema de la "nueva imagen" vemos que no hay tal cosa en cuanto a la extensión de la vela, pero si en cuanto a su función y otras propiedades (di NO al dimetrodonte deformado de espinas desnudas). De tal forma que hay que tener en cuenta que no son los ilustradores con sus obras los que generan el conocimiento paleontológico, ellos lo transmiten y hay ocasiones como esta, en la que han errado al interpretar el conocimiento científico. Esto nos llama a tener cuidado con lo que circula en las redes y ser más críticos con la información. Con todo y ello, lo que hemos aprendido gracias al artículo de Rega y colaboradores es invaluable para nuestro entendimiento de los dimetrodontes, sus patologías y la función de sus extravagantes velas.

Me despido con esta hermosa reconstrucción de Dimetrodon giganhomogenes con una vela patológica moderada, obra de Michael Skrepnick y uno de los dimetrodontes más fieles al conocimiento científico actual.



LITERATURA CONSULTADA:

Rega, E. A., Noriega, K., Sumida, S. S., Huttenlocker, A., Lee, A., & Kennedy, B. (2012). Healed fractures in the neural spines of an associated skeleton of Dimetrodon: implications for dorsal sail morphology and function. Fieldiana Life and Earth Sciences, 104-111.

Ibrahim, N., Sereno, P. C., Dal Sasso, C., Maganuco, S., Fabbri, M., Martill, D. M., ... & Iurino, D. A. (2014). Semiaquatic adaptations in a giant predatory dinosaur. Science, 345(6204), 1613-1616.
Angielczyk, K. D., & Schmitz, L. (2014). Nocturnality in synapsids predates the origin of mammals by over 100 million years. Proceedings of the Royal Society B: Biological Sciences, 281(1793), 20141642.

Adendo visual:

Nobu Tamura sacó esta imagen recientemente y es la más fiel en cuanto a lo que dice el artículo de la vela patológica.

miércoles, 26 de agosto de 2015

PALEOFICHA: Protorosaurus speneri

Nombre común: No tiene, pero le podemos decir "protorosaurio de Spener" o simplemente "protorosaurio".

Nombre científicoProtorosaurus speneri (pro-to-ro-sa-u-rus / s-pe-ne-ri).

Significado del nombre: "Primer reptil de Spener".

Descrito por: Christian Erich Hermann von Meyer en 1830*.

Grupo taxonómico: pertenece a la familia Protorosauridae, incluida en el grupo denominado Protorosauria. Los protorosaurios fueron unos de los primeros arcosauromorfos, un grupo que hoy incluye sólo a las tortugas, los cocodrilos y las aves (descendientes de los dinosaurios). Es el grupo contrario a los lepidosauromorfos, que incluyen al resto de los "reptiles" del planeta.

Espécimen WMsN P 47361 de Protorosaurus speneri. Tomado de Gottmann-Quesada y Sander (2004) "A redescription of the early archosauromorph Protorosaurus speneri MEYER, 1832, and its phylogenetic relationships".

Rango temporal: Pérmico tardío de entre hace 259 y 254 millones de años.

Encontrado en: La Formación Kupferschiefer de Alemania e Inglaterra.

Conocido a partir de: esqueletos incompletos (de Alemania se conocen más de 28) y varias partes aisladas como regiones de las patas traseras y delanteras, así como del cráneo.

Reconstrucción y escala de Protorosaurus speneri elaborada expresamente para el blog por Oscar Calva (es la primer obra propia del blog no hecha por mi ¡yuju!).

Curiosidades: El nombre específico de Protorosaurus speneri hace honor al anatónomo alemán Christian Maximilian Spener quién en 1706 hizo la primer descripción de restos fósiles de esta especie. Lo curioso es que Spener no lo reconoció como algo nuevo y pensó que eran huesos de cocodrilo del Nilo. Aún con todo, la descripción de Spener se cuenta entre las primeras documentadas para un reptil y la primera de un reptil fósil (el nombre de "primer reptil" le sienta de lujo). Existe una segunda especie no reconocida de Protorosaurus que fue renombrada como Adelosaurus huxleyi, pero hoy se sospecha que la especie no es válida y que podría ser de una criatura no relacionada a Protorosaurus. Un bicho completamente distinto casi acaba con el mismo nombre que Protorosaurus, pues en 1914, el geólogo canadiense Lawrence Morris Lambe le puso el nombre a un dinosaurio con cuernos que hoy conocemos como Chasmosaurus. El cráneo de Protorosaurus era pobremente conocido y hasta 2009 recibió una descripción detallada (junto con el resto de su esqueleto), este estudio le cambió el rostro y nos mostró un animal con una cara más alargada y proporciones más finas. El estudio de 2009 también mostró los primeros ejemplares juveniles de este reptil. Como pueden ver en la reconstrucción, Protorosaurus era un bicho esbelto y con miembros largos, esto y el hecho de que sus fósiles se encuentren en ambientes otrora marinos, sugiere que habitaba cerca a la costa. Algunos se han aventurado más allá y han sugerido que era de hábitos semiacuáticos (como en esta reconstrucción). Curiosamente, un estudio de 1993 revela el aspecto más impactante de este animal, se alimentaba de las estructuras reproductoras de una conífera (Ullmannia frumentaria). Esto nos sugiere que era terrestre y que además era vegetariano (al menos en parte) y se cuenta como uno de los vertebrados terrestres más antiguos con dieta conocida.

* Descripción original: Von Meyer, H. (1830). Protorosaurus. Isis von Oken, 1830, 517-519.

PALEOFICHAS ANTERIORES:
2. - Diplodocus spp.
3. - Lystrosaurus spp.


Literatura consultada:

Gottmann-Quesada, A., & Sander, P. M. (2009). A redescription of the early archosauromorph Protorosaurus speneri MEYER, 1832, and its phylogenetic relationships. Palaeontographica Abteilung A, 123-220.

Munk, W., & Sues, H. D. (1993). Gut contents of Parasaurus (Pareiasauria) and Protorosaurus (Archosauromorpha) from the Kupferschiefer (Upper Permian) of Hessen, Germany. Paläontologische Zeitschrift, 67, 169-176.

Evans, S. E., & King, M. S. (1993, May). A new specimen of Protorosaurus (Reptilia: Diapsida) from the Marl Slate (late Permian) of Britain. In Proceedings of the Yorkshire Geological and Polytechnic Society (Vol. 49, No. 3, pp. 229-234). Geological Society of London.

Rieppel, O., Fraser, N. C., & Nosotti, S. (2003). The monophyly of Protorosauria (Reptilia, Archosauromorpha): a preliminary analysis. Atti della Società italiana di Scienze naturali e del Museo Civico di Storia naturale di Milano, 144(2), 359-382.

Godfrey, S. J., & Holmes, R. (1995). Cranial morphology and systematics of Chasmosaurus (Dinosauria: Ceratopsidae) from the Upper Cretaceous of western Canada. Journal of Vertebrate Paleontology, 15(4), 726-742.

domingo, 23 de agosto de 2015

Pobres cocodrilos

Los cocodrilos y las aves son los únicos arcosaurios vivientes, los últimos de un gran linaje de criaturas que entre otras, produjo a los dinosaurios y a los pterosaurios (los primeros vertebrados volantes). A diferencia de sus primos cercanos, los lepidosaurios, los arcosaurios escamosos son poco variables, es decir, casi todo cocodrilo tiene una forma muy conservadora.

En términos no científicos y generales, este es el plan corporal de los cocodrilos modernos.

Su diseño corporal es tan único que no es difícil ver que un cocodrilo, un caimán, un gavial y un aligátor son parientes. Pero ¿qué es un cocodrilo? Si somos muy, pero muy estrictos, un cocodrilo es un animal del género Crocodylus y los demás son crocodilianos es decir, miembros de un grupo llamado Crocodylia. Y en el sentido más amplio (pero válido), un cocodrilo verdadero es miembro del grupo Eusuquia, palabra que significa "cocodrilo verdadero".

Tal y como explico en mayor detalle en esta entrada (clic para ver), sólo deberíamos decirle "cocodrilo" a los miembros del género Crocodylus (sensu stricto) o a los miembros del orden Crocodylia o del grupo Eusuquia (sensu lato); estos grupos están representado en este árbol evolutivo con puntos naranjas. Siluetas de Phylopic e ilustraciones (siluetizadas) de Kawasaki Satoshi y Jaime A. Headden.

Pero ¿por qué diantres podría ser importante darle nombres separados a los cocodrilos? ¿no sería más fácil llamar cocodrilo a todo lo que se le parezca? Después de todo, los medios lo hacen y los documentales también. Bueno, si sería fácil y sin duda es una herramienta muy buena para que la gente entienda cuáles son los parientes vivos más cercanos de los bichos que nos ponen en pantalla.

Desmastosuchus, un animal que en documentales ha sido referido como cocodrilo vegetariano y ni siquiera era un crocodilomorfo, pero sus primos lejanos vivos más cercanos son los cocodrilos. Si yo no fuera paleontólogo o paleofriki no sabría ni de chiste que esto es un pariente lejanísimo de los cocodrilos y quizá hasta pensaría que es un jabalí raro o un armadillo. Imagen del documental "When dinosaurs roamed".

Pero lo fácil no siempre es lo correcto. Si no, yo estaría escribiendo sobre animalismo y veganismo en vez de paleontología o robaría en vez de trabajar. Y el reconocer a las cosas por su nombre nos facilita no sólo el comunicarnos, sino que además sirve para poder reconocer la profundidad de la historia evolutiva de los grupos biológicos. En este sentido, es importante decirles a los bichos por el nombre. Y si no me creen viene el argumento que inició este tema... Pobres cocodrilos, nadie los reconoce y llaman cocodrilo a lo que sea que se les parezca aunque sea un poco.

El Sarcosuchus del documental Planet Dinosaur parece tanto un cocodrilo que en el documental lo refieren como tal. Caso curioso es que los cocodrilos pequeños, sí son cocodrilos, aunque en la Formación Elrhaz (de donde vienen los restos de Sarcosuchus) no hay evidencia de ellos. Adicionalmente, el sarcosuco es en realidad un crocodilomorfo (como cualquier cocodrilo vivo), pero del grupo de los folidosáuridos (familia Pholidosauridae) y no es ni un Eusuquio, Crocodiliano o cocodrilo verdadero.

Y para poner las cosas en perspectiva, haré algunas comparaciones...

Nadie tiene problemas en llamar "ave" a cualquier miembro de los nodos en naranja, desde Archaeopteryx y los avialanos (punto inferior), las euornitas "aves verdaderas" (punto medio) o las neornitas (punto superior). Pero nadie nunca jamás en sus cinco sentidos llamará "ave" a un Velociraptor, a un Therizinosaurus, a un Gallimimus o a un Tyrannosaurus, incluso si sabemos que anatómicamente son extremadamente similares a las aves. ¿Entonces por qué sí lo hacemos con los cocodrilos? Ilustraciones de Kawasaki Satoshi.

¿Aún no estás convencido de que es injusto llamar cocodrilo a los crocodiliformes no crocodilianos? Te pongo otro ejemplo ilustrativo.

Algo similar ocurre con los dinosaurios, no nos resulta nada difícil extrañarnos e incluso ofendernos si alguien dice que un Pteranodon es un dinosaurio volador, alguien más observador también verá con extrañeza que le digan dinosaurio a Silesaurus o a Lagerpeton, pues esos no son dinosaurios, son dinosauromorfos y dinosauriformes respectivamente, que tienen familias propias. Pero de alguna manera está bien hacérselo a los cocodrilos, total, ellos ni sienten (por aquello de las lágrimas de cocodrilo). Ilustraciones de Kawasaki Satoshi, excepto Lagerpeton, que es de Nobu Tamura.

Y así podría seguir con los humanos, con los primeros vertebrados con patas (tetrápodos), etc. El punto es que con otros grupos biológicos sí tenemos una terminología clara y precisa, un T. rex es un tiranosáurido y no un ave, un Pterodactylus es un pterosaurio y no un dinosaurio, un Ventastega no es un tetrápodo, es un tetrapodomorfo, un Australopithecus no es humano, etcétera. Pero para los cocodrilos no usamos algo similar, llamamos a diestra y siniestra como "cocodrilo" a todo lo que se le parezca, despojando a estos pobres animales prehistóricos de sus nombres (nadie siente casi nada por los esfagesáuridos, los sebécidos, los uruguaysúquidos, estomatosúquidos, mahajangasúquidos, folidosáuridos, metriorínquidos, teleosáuridos, etc, etc, etc.) y de que en realidad la diversidad de formas que tuvieron es mucho más grande que un panqueque verde de río con muchos dientes.

Armadillosuchus arrudai, un favorito personal a quién no le degradaré a decirle simplemente "cocodrilo", pues no lo era, era un notosuquio esfagesáurido. ¿Apoco no les dan ganas de investigar o saber más de sus parientes cercanos? Ilustración de Jakub "kahless28".

Así que ya lo sabes estimado lector, todos estos anónimos "cocodrilos" en realidad no lo son y tienen sus nombres, ¡hagamos uso de ellos!


martes, 18 de agosto de 2015

PALEOFICHA: Lystrosaurus spp.

Nombre común: Listrosaurios (castellanizado del nombre del género).

Especies reconocidasL. murrayi (especie tipo), L. declivus, L. curvatus, L. maccaigi, L. georgi, L .amphibius, L. bothai, L. breyeri, L. broomi, L. hedini, L. jeppei, L. jorisseni, L. latifrons, L. primitivus, L. putterilli, L. rajurkari, L. robustus, L. rubidgei, L. theileri, L. wageri, L. wagneri, L. weidenreichi y L. youngi.

Significado del género: "Lagarto pala".

Género descrito por: Edward Drinker Cope en 1870.

Grupo taxonómico: Sinápsidos (Synapsida) dicinodontos (Dicynodontia).


Lystrosaurus murrayi en el Museo de Historia Natural de París. Foto de FunkMonk.

Lystrosaurus georgi en el Museo estatal de Historia Natural de Stuttgart. Fotografía de bookscorpion.


Rango temporal: Pérmico tardío al Triásico temprano, de 255 a 251.3 millones de años.

Encontrado en: la Antártida, China, India, Sudáfrica y Zambia.

Conocidos a partir de: Múltiples esqueletos y restos aislados, incluidas madrigueras.

Reconstrucción de Lystrosaurus por John Sibbick.

Curiosidades: El género Lystrosaurus es uno de los géneros de sinápsido con el mayor número de especies descritas, se sospecha que puede ser una caja de sastre y que en realidad contenga varios géneros distintos. Estos vegetarianos tenían un rango de medidas bastante extremo, los más pequeños medían unos 60 cm de largo cuando adultos y pesaban 5 Kg, mientras que las especies mayores medían unos 2.5 m de largo y pesaban cerca de 200 Kg. Lystrosaurus es famoso, hizo una aparición breve en el documental "The Day The Earth Nearly Died" de la BBC (que puedes ver en este enlace, en inglés), otra en el documental "Caminando con monstruos" o "Paseando con monstruos" de la BBC (que puedes ver en este enlace en español) y en muchos otros más.  La distribución geográfica de los listrosaurios, en África, India y Antártica se considera como evidencia de la interconexión de estas masas de tierra y como evidencia de la deriva continental y tectónica de placas. Se conocen madrigueras de Lystrosaurus que tienen la peculiaridad de ser espiraladas hasta la base, donde descansaban los listrosaurios. Originalmente, Lystrosaurus fue descrito por Thomas H. Huxley en 1859 (el mismo año que Darwin publicó el Origen de las Especies), pero como una especie del género Dicynodon, por lo que Cope se lleva la descripción del género como tal, misma que hizo en 1870, unos 20 años después.  Hubo un intento de cambiar el nombre de Lystrosaurus por Ptychognathus, pero el género ya estaba ocupado, es el nombre de un cangrejo. Y finalmente, ha sido una de los pocos taxones que ha dominado grandes zonas del planeta durante un lapso considerable de tiempo sin competidores y pocos o ningún depredador natural importante, esto debido a que los listrosaurios eran de los pocos vertebrados que sobrevivieron a la extinción del Pérmico/Triásico.


Descripción original: Cope, E. D. (1870). On the skull of dicynodont Reptilia. Lystrosaurus frontosus from Cape Colony. Proceedings of the American Philosophical Society, 11: 419.

Huxley, T. H. (1859). On a New Species of Dicynodon (D. Murrayi) from near Colesberg, South Africa. Quarterly Journal of the Geological Society, 15(1-2), 555-556.


PALEOFICHAS ANTERIORES:
2. - Diplodocus spp.


jueves, 13 de agosto de 2015

PALEOFICHA: Diplodocus spp.

Nombre común: Diplodoco.

Especies reconocidas: D. longus (especie tipo), D. carnegii y D. hallorum.

Significado del género: "Doble viga", en referencia a los cheurones (huesos de la cola) con dobles proyecciones (clic aquí para una imagen).

Género descrito por: Othniel Charles Marsh en 1878.

Réplica de "Dippy", un D. carnegii, expuesto en el Museo de Historia Natural de Londres. Fotografía por Drow male.

Rango temporal: Jurásico tardío, de entre hace 150.8 y 145.5 Ma.

Encontrado en: Estados Unidos, en los estados de Colorado, Montana, Nuevo México, Oklahoma, Dakota del Sur, Utah y Wyoming.

Conocidos a partir de: Numerosos esqueletos casi completos y elementos ailsados como vértebras y huesos de las patas.

Reconstrucción de un Diplodocus siendo perseguido por un par de Allosaurus. Volando podemos ver a un par de posibles Harpactognathus Comodactylus y junto al charco, un Ornitholestes. Hermosa reconstrucción de Douglas Henderson.

Curiosidades: A pesar de ser uno de los géneros mejor conocidos de dinosaurio, su especie tipo (D. longus) puede ser un nomen dubium (nombre dudoso e inválido), pues los restos descritos originalmente por Marsh no tienen características especiales que los distingan de otros diplodocos. Gracias a esto, se ha hecho la solicitud a la Comisión Internacional de Nomenclatura Zoológica para proteger el nombre del género y cambiar la especie tipo a D. carnegii. D. carnegii es una de las primeras especies en ser nombradas en honor a un patrocinador, el magnate industrial Andrew Carnegie, quién además de apoyar la paleontología, donó réplicas de este dinosaurio a muchos museos del mundo que incluyen el Museo Nacional de Ciencias Naturales de España y el extinto Museo de Paleontología de México (hoy, Museo de Historia Natural y Cultura Ambiental de la Ciudad de México), el Museo de la Plata en Argentina y muchos más. Diplodocus hallorum era conocido como Seismosaurus halli (nombre que hoy es inválido) y por algún tiempo fue considerado el dinosaurio más grande (largo) que haya existido, tenía una longitud estimada en 30 a 33 metros de largo. Desde un artículo de 1992, se le reconstruye con púas dérmicas similares a las de una iguana en el lomo, la naturaleza real de estas presuntas púas es desconocida (algunos han sugerido que pudieran ser restos de plantas) y no han sido descubiertas en ningún otro saurópodo (ni siquiera en los embriones de titanosaurio) por lo que podrían ser o no ser reales. Sus parientes más cercanos son Kaatedocus siberi (descrito en 2012) y Barosaurus lentus (descrito desde 1890). Diplodocus aparece en varias cintas y documentales, pero se hizo famoso por segunda vez gracias a la serie de la BBC "Walking with dinosaurs" de 1999. El músico y DJ Thomas Wesley Pentz, alias "Diplo" tomó su nombre artístico de este dinosaurio (haz clic en este enlace para ver un video de Diplo).


Descripción original: Marsh, O. C. (1878). Principal characters of American Jurassic dinosaurs. American Journal of Science, (95), 411-416.


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