Bienvenidos de nuevo a este tipo de entradas donde hago una crítica constructiva de una pieza de ilustración paleontológica con el motivo de aprender y divertirnos. En ningún momento considero que la obra sea mala o que deba desecharse, si esta aquí es porque aporta algo al conocimiento de forma gráfica y agradable. Así que comencemos.
Artista: RJ Palmer "arvalis".
Obra:
La obra en cuestión, diseñada para el juego Saurian. En este enlace pueden verla más grande y descargarla.
¿Qué especie estamos viendo? Tyrannosaurus rex, el más famoso de todos los dinosaurios.
Lo bueno:
- Tiene plumas y contribuye a generar una idea más moderna de los dinosaurios, una acorde a la evidencia.
- Tiene integumento oral y no anda con los dientes expuestos.
- Tiene buenas proporciones.
- Al fin, un ilustrador sin las urgentes ganas de enseñar brazos humanoides en un T. rex.
- Los pies tienen una buena cobertura de tegumento, no más pies de pollito y pajarito.
- Nada de cuernos de vaca brillosos y cornudos, sino que tiene partes queratinizadas, una maravilla.
Lo malo:
- Los ojos quizá sean demasiado pequeños (pero en este punto yo podría estar completamente errado).
- Tiene plumas en etapa 2 y 3, cuando los tiranosauroides sólo tienen evidencia de la etapa 1. ACTUALIZACIÓN. Hay evidencias que sugieren que Dilong tuvo plumas de etapa II, eso indica que pueden existir plumas con filamentos múltiples emergiendo de un punto común, pero no existiría un cañón ni un vexilo.
- Tiene alas (pennibrachia), cuando en realidad esa condición sólo aparece en Maniraptoriformes como Ornithomimosauria, Oviraptorosauria y Paraves. ACTUALIZACIÓN. Tal parece ser que las plumas del brazo de esta representación son alargadas y no representan pennibrachia. Pero aún hay zonas con plumas en etapa III, lo que no está apoyado por la evidencia.
- Tiene escamas escutadas en las patas traseras, pero no hay evidencia de ellas en el dorso de los dedos. Concavenator tiene este tipo de escama, pero sólo la región del metatarso. Usar a Parahesperornis como ejemplo es muy arriesgado, es como querer que los animales como Ophiacodon tengan pelos sólo porque un ornitorrinco los tiene (además el fósil de Parahesperornis sólo tiene escamas escutadas en el metatarso, no en los dedos).
- Típico meme de vientre y otras zonas calvas. No hay evidencia de ello en los dinosaurios emplumados no avianos, hasta ahora no ha aparecido un sólo dinosaurio con esta configuración. Por lo tanto, es altamente especulativa. Se ha sugerido esta configuración porque se asume que los dinosaurios como este 1 eran endotermos y 2 no tenían mecanismos para disipar el calor. Y sabemos que 1 es probable que hayan sido mesotermos y 2 en realidad contaban con muchos mecanismos para disipar calor tales como: la forma de respirar (circulación doble), la presencia de sacos aéreos, la posesión de una gran superficie corporal en relación a la masa y que las plumas no son iguales a los pelos, ellas si permiten que el ave no se recaliente.
- La textura de las escamas no se corresponde con las escamas que presenta como fotos. Si bien no se sobrelapan en el dibujo, todas son ovales (cual bacilo bacteriano) y las escamas reticuladas no tenían esta forma, eran más redondeadas a hexagonales.
- Las impresiones de piel de la cola se conocen sólo en BHI 6230 (Wyrex) y dichas impresiones se ubican en la parte ventral/lateral de la cola. Hacer una cola completamente calva es por lo tanto un error. Además de que no se ha hecho análisis tafonómico alguno, por lo que no sabemos si en realidad esta zona sería calva o si las plumas se perdieron. A diferencia de Kulindadromeus, donde existe coexistencia de plumas y escamas, T. rex no se encuentra preservado en sedimentos así de finos (de sedimentos lacustres), por lo que de existir las plumas es poco probable que se encuentren asociadas al esqueleto.
- Detalle minúsculo: parece que al autor se le olvidó colocar el dedo I de las patas traseras, mismo que pueden ver en este montaje esquelético. ACTUALIZACIÓN. Si bien, en esta reconstrucción no hay dedo I, éste si aparece en el modelo 3D que puedes ver haciendo clic aquí.
Conclusión:
Este T. rex es una obra muy buena y sin duda de las pocas que toman y hacen uso de la nueva imagen de los dinosaurios. Pero como toda obra conceptual de videojuego, es sujeto de cambios para hacerla más atractiva y recordemos que no fue hecha para complacer a los científicos, sino a los potenciales compradores del juego. ACTUALIZACIÓN. De nuevo, tal parece existir la impresión de que este es un post que demerita la obra de R. J. Palmer y no es el caso (la obra me gusta). El punto es enriquecer nuestros conocimientos sobre los dinosaurios y no quedarnos con cualquier cosa que nos den.
Referencias:
Larson, P. L., & Carpenter, K. (2008). Tyrannosaurus rex, the tyrant king. Indiana University Press.
Godefroit, P., Sinitsa, S. M., Dhouailly, D., Bolotsky, Y. L., Sizov, A. V., McNamara, M. E., ... & Spagna, P. (2014). A Jurassic ornithischian dinosaur from Siberia with both feathers and scales. Science, 345(6195), 451-455.
Cuesta, E., Díaz-Martínez, I., Ortega, F., & Sanz, J. L. (2015). Did all theropods have chicken-like feet? First evidence of a non-avian dinosaur podotheca. Cretaceous Research, 56, 53-59.
Williston, S. W. (1896). On the dermal covering of Hesperornis. Kansas University Quarterly, 5(1), 53-54.
ACTUALIZACIÓN:
Se argumentó en los comentarios que la cola con plumas sería igual de especulativa que una cola sin ellas. Eso no es cierto, la inferencia de horquillado filogenético y el método científico nos indican que debemos buscar muestras de integumento caudal en parientes próximos. Y precisamente, los parientes de T. rex muestran colas con plumas.
Dilong paradoxus según aparece en "Xu, X., Norell, M. A., Kuang, X., Wang, X., Zhao, Q., & Jia, C. (2004). Basal tyrannosauroids from China and evidence for protofeathers in tyrannosauroids. Nature, 431(7009), 680-684." Noten las plumas de la cola, desafortunadamente no figura una foto de esta zona. Pero eso nos lo resuelve el siguiente tiranosauroide.
Fragmento de cola de Yutyrannus huali según aparece en "Xu, X., Wang, K., Zhang, K., Ma, Q., Xing, L., Sullivan, C., ... & Wang, S. (2012). A gigantic feathered dinosaur from the Lower Cretaceous of China. Nature, 484(7392), 92-95.". Noten también que hay impresiones de plumas tanto en la parte dorsal como ventral de la cola.