¿Qué eran esas cosas llamadas cuellos largos?

De entre todos los dinosaurios podemos distinguir con claridad diferentes tipos básicos, tenemos a los carnívoros bípedos (terópodos), a los dinosaurios acorazados (como Ankylosaurus y Stegosaurus) a los que tenían cuernos (como Triceratops), a los que tenían domos en la cabeza (como Pachycephalosaurus), a los que tenían un pico córneo y caminaban por lo general en dos patas (como Iguanodon, Hadrosaurus y Parasaurolophus) y algunas formas menos comunes. Pero sin dudas, los dinosaurios que más evocan el gigantismo son los populares cuellos largos.

Theropoda, los únicos dinosaurios sobrevivientes y además, primos cercanos de los cuello largos. Ilustración por el artista checo Karel Cettl.

Si nombre formal es Sauropoda, un nombre que significa literalmente "patas de lagarto", aunque sus patas son más parecidas a las de un elefante. Estas criaturas fueron los bichotes más grandes que caminaron por nuestro planeta, algunos de ellos sobrepasaban las decenas de toneladas y metros, lo que los hace los únicos "kaijus" reales que han existido (al menos en tierra).

Un "saurópodo kaiju" (kaiju para los no iniciados en frikología japonesa, significa "monstruo" y generalmente se representan con bestias gigantescas). Ilustración del artista Bracey100.

La primer caricatura que "revivió" a un dinosaurio fue hecha reconstruyendo a un "cuello largo", nombre que se popularizó por la cinta "The Land Before Time" que es conocida en españa como "En busca del valle encantado" y en latinoamérica como "La tierra antes del tiempo", que narra las aventuras de un grupo de pequeños dinosaurios cuyo líder es un apatosaurio, un tal "Pie pequeño".

Personajes de la cinta "The land before time" de 1988, un tesoro para los frikis veteranos y algunos retrofrikis. Ilustración de Mikael Vanlande. Ah si, pie pequeño es el dinosaurio café (aunque era algo así como morado en las cintas) que porta un extraño pterosaurio en el lomo.

Pero no todo lo que tiene un gran pescuezo es un saurópodo, no. Algunos pescuezones ni siquiera son dinosaurios, otros lo son, pero pertenecen a otros grupos. Y ni hablar de los "prosaurópodos", criaturas ancestrales a los saurópodos que aún podían ir a dos patitas si lo deseaban, algo prohibido para los verdaderos "cuellos largos".

Tanystropheus, unos pescuezones que ni siquiera eran dinosaurios. Arte por Fabio Pastori. Por cierto, ningún saurópodo era marino o remotamente acuático (al menos no se conoce ninguno por ahora).

Científicamente, los saurópodos (Sauropoda) eran dinosaurios que de forma primitiva poseían las siguientes características:

1. Todos eran gigantes, de entre 5 y >50 metros de longitud.

2. Tenían un cuello y cola alargados (flechas diagonales en el esqueleto).

3. Sus cabezas eran pequeñas con respecto al tamaño de sus cuerpos (flecha vertical).

4. Todos eran cuadrúpedos obligados.

5. Miembros (flechas horizontales) de tipo graviportal (con forma de pilar para soportar grandes pesos).

6. Dientes simples y sin filo (flecha diagonal en cráneo).

7. Las fosas nasales (iluminadas en rojo) tendían a estar en la parte dorsal del cráneo.

8. Fosas nasales cercanas a las órbitas oculares (iluminada en azul).

9. Vértebras con proyecciones laterales amplias (proceso caudal transverso, iluminado en verde en las vértebras cervical [izquierda], dorsal [en medio] y caudal [derecha]) y apuntando hacia atrás.

10. Manos y pies con cinco dedos.

11. Tendencia a la reducción y pérdida de dedos, pero no de metacarpos (huesos de la palma).

12. Manos sin cojinetes de grasa y usualmente en arreglo semicircular (como herradura).

13. Tendencia a conservar la garra del dedo I (equivalente al pulgar) de las patas delanteras y al menos dos garras en los dedos de las patas traseras.

Esquema representativo de las características compartidas de los saurópodos. Todos los esquemas representan al género del Jurásico Diplodocus. Esqueleto por Scott Hartman. Cráneo de T. L. Ford. Vértebras y miembros delanteros/traseros por Denise Bladgen y David Nichols. Para las claves de color véase la lista que está justo antes de esta imagen.

Los saurópodos fueron unas criaturas impresionantes, no sólo por su gran tamaño, sino por su biología y sus adaptaciones que aún hoy no nos dejan de sorprender. De no haberse extinto, quién sabe a dónde podrían haber ido a parar estas bestias.