domingo, 19 de agosto de 2012

Homo rudolfensis al fin es una especie válida


En 1972 Bernard Ngeneo, miembro del equipo de excavación del arqueólogo Richard Leakey y la zoóloga Meave Leakey, descubrió un cráneo fragmentado en el sitio Koobi Fora, situado en las márgenes del lago Turkana, en Kenia, África. El espécimen (KNM-ER 1470) fue descrito por Valeri Pavlovich Alekseyev en 1978 como Pithecanthropus rudolfensis, nombre que fuera cambiado a Homo rudolfensis en 1999 por Bernard Wood.

Figura 1. Arriba, izquierda: Richard y Meave Leakey. Abajo, izquierda: sitio del hallazgo de Homo rudolfensis (tomado de Paleobiology Database). Derecha: espécimen KNM-ER 1470 (tomado de Science Photo Library).

A diferencia de lo que sucede con restos de otras especies, los restos de homínidos reciben un trato mucho más meticuloso y por ello, la implantación de una nueva especie a partir de un elemento único es válida, pero aceptada con mucha reticencia y ese fue precisamente el caso de rudolfensis. De hecho, de no ser por la antigüedad que presenta, es muy probable que no hubiera suscitado tanto debate y fuera aceptado con mayor facilidad.

Figura 2. Reconstrucción del cráneo de H. rudolfensis.

Los primeros fechamientos del cráneo lo situaron hace 3 millones de años, sin embargo, hoy sabemos que tiene una antigüedad de entre 2.5 y 1.8Ma. El “inconveniente” es que, resulta ser más viejo que los restos fósiles más antiguos del género Homo que se conocían, mismos que corresponden a Homo habilis, que vivió entre hace 2.1 y 1.5Ma.

Figura 3. Homo habilis, el presunto primer fabricante de herramientas de nuestro árbol genealógico y sus obras de arte (tomado de Science Photo Library).

De hecho, algunos paleoantropólogos sugerían que en realidad H. rudolfensis era un individuo raro de H. habilis y que por lo tanto, no sería una nueva especie. Sin embargo, análisis de la morfología fina revelaron que rudolfensis era muy distinto a habilis, mucho más de lo que se esperaría si fuera de un sexo distinto o sólo un individuo aberrante. Posteriormente, análisis de la dieta basados en el desgaste de los molares de rudolfensis y molares de varios individuos de habilis mostraron que de hecho, estos organismos tenían nichos ecológicos distintos (rudolfensis era más vegetariano y habilis un omnívoro) y que por lo tanto, eran dos especies diferentes.

Figura 4. Cráneos de H. rudolfensis (izquierda) y H. habilis (derecha), a escala. Imagen tomada de Science Photo Library.

Con todo y la evidencia en las narices, varios científicos se mostraron escépticos y pidieron una última prueba de fuego: encontrar más restos de H. rudolfensis. La proeza no sería completada hasta Agosto 8 de 2012, cuando se publicó en Nature*, un estudio sobre el hallazgo de un rostro inferior y una mandíbula inferior que presuntamente corresponden a H. rudolfensis.

Fig. 5. Comparación de reconstrucciones faciales científicas de H. rudolfensis (izquierda) y H. habilis (derecha).

Aún con este nuevo hallazgo surge un nuevo debate, propuesto por el arqueólogo Lee Rogers Berger, sobre si en realidad estos restos representan a H. rudolfensis o sólo son restos de H. habilis o peor, de Australopithecus africanus, una especie que ni siquiera forma parte del género Homo. Leakey, el autor del trabajo de 2012, replicó diciendo que si se encontrase una especie de homínido viva o extinta que mostrara semejante variación se rechazaría la noción de que estos restos corresponden a H. rudolfensis. El punto a favor de Leakey es precisamente lo que él mismo menciona: no existe ninguna especie conocida que presente tal variación intraespecífica en rasgos tan importantes como el reconocimiento visual entre miembros de la misma especie. De hecho, en un tiempo en el que existieron muchas especies de homínidos parecidos, lo mejor sería ser distintos unos de otros para evitar confusiones amorosas.

Figura 6. Arriba y en medio: los especímenes nuevos de Homo rudolfensis. Abajo izquierda: delineado en negro: reconstrucción de la dentadura superior del espécimen KNM-ER 62000, en gris: modelo 3D de la mandíbula inferior del espécimen KNM-ER 60000 (Homo rudolfensis). Abajo derecha: delineado en negro la reconstrucción de la dentadura superior de KNM-ER 62000 (Homo rudolfensis), en gris, modelo 3D de la mandíbula KNM-ER 1802 correspondiente a Homo habilis. Se aprecia que los especímenes asignados a Homo rudolfensis coinciden y tenían un rostro más plano que el de Homo habilis.

El debate seguirá entre pequeñas facciones sin embargo, el consenso científico es que Homo rudolfensis es una especie válida de homínido primitivo, pero no sólo eso, sino que además es la especie más antigua de nuestro linaje: el género Homo, al que corresponde nuestra especie: Homo sapiens. Su confirmación como especie válida corrobora lo que ya antes sospechábamos: la historia evolutiva de nuestro grupo de simios bípedos es más compleja de lo que suponíamos y no representa para nada una línea de progreso ininterrumpido, sino una gran diversidad de ensayos que el clima terminó por extinguir.

La cuestión ahora es averiguar: ¿Es Homo rudolfensis el ancestro de Homo habilis o son ambas especies hermanas derivadas de una especie aún no descubierta de Homo? La respuesta será sin duda interesante.

Artículo de Nature
Leakey, M., F. Spoor, M. C. Dean, C. S. Feibel, S. C. Antón, C. Kiare y L. N. Leakey. 2012. New fossils from Koobi Fora in northern Kenya confirm taxonomic diversity inearly Homo. Nature. 488: 201-204pp.

4 comentarios:

  1. pero como era su forma de vida. el homo rudolfensis

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, gracias por comentar.

      Habrá que hacer estudios más exhaustivos sobre la dieta de este homínido. La verdad cualquier dato que te pueda ahora dar sería una mentira.
      Habrá que esperar a que se hagan los estudios pertinentes.

      SALUDOS

      Eliminar
  2. Hola, podrias decirme como era la forma de vida del homo rudolfensis? gracias.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, me gustaría pero esos son datos por el momento desconocidos. Hacen falta estudios al respecto.

      SALUDOS

      Eliminar

Hola, ¡gracias por comentar!
*Los comentarios ofensivos, que intenten trollear o provocar serán borrados sin excepción alguna.
*Ya no podrán comentar los anónimos, te recomendamos dar de alta o usar una cuenta de Google, LiveJournal, WordPress, TypePad, AIM u OpenID. Gracias por tu comprensión.