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martes, 28 de mayo de 2019

¿Dónde están mis oídos Summer?


ACTUALIZACIÓN PENDIENTE
"Este post no es válido, favor de ignorar las conclusiones contenidas en este"

Próximamente haré una actualización del mismo.

Hola a todos. En esta ocasión quisiera abordar brevemente algo que he notado causa problemas a la hora de reconstruir dinosaurios. ¡El oído!


Y es que, he notado que muchísimos paleoartistas colocan el oído, o mejor dicho, la salida/entrada del canal auditivo externo (cuyo nombre técnico es meato auditivo) en esta parte del cráneo:


Esto desde luego me hizo voltear la cabeza y preguntarme ¿dónde se ubicaría realmente? ¿Si va en esa zona? Y es que, si lo notan, lo colocan excluyéndolo de la cabeza. Y para responder esto tenemos que hacer algo simple: ver a los dinosaurios modernos y sus parientes. O sea: aves y cocodrilos. En ellos ¿dónde está el oído?


En los cocodrilos el meato auditivo está próximo a la órbita, justo detrás del ojo.

En rojo, se señala el meato auditivo externo. En verde, la posición verdadera (aproximada) de la membrana timpánica. Fotografía de Hilary Bierman.

La posición del meato y de la membrana timpánica está justo debajo del escamoso y bordeado por detrás y por debajo por el escamoso, en un espacio llamado "receso ótico" (bújero pal oído, en términos menos formales). Si esto fuera similar en dinosaurios, el meato auditivo estaría situado en esta zona:

En amarillo, la posición del meato auditivo y de la membrana timpánica si el dinosaurio (en este caso un T. rex) tuviera la configuración de un cocodrilo.

Pero dado que los cocodrilos son parientes más bien distantes, lo mejor quizá sería mirar dinosaurios vivos, a las aves. Veamos dónde está el meato en las aves...


Jmmm... Tanta pluma obscurece el asunto. Veamos ahora dos ejemplos de aves sin plumas para apreciar mejor esto.

Cría de paseriforme. Noten cómo el canal está extremadamente bajo en el cráneo, casi en contacto con la mandíbula.

El canal auditivo de un casuario.



En las aves el oído se localiza en una región craneal llamada "receso timpánico". Éste, está ubicado detrás del cuadrado. Aunque suele emerger más arriba, en una zona llamada "rete mirabile auriculare".

En rojo la ubicación del meato auditivo en un pavo.

Precisamente esta ubicación hace pensar que si retrocedemos en el tiempo, la caja craneana se hará más pequeña y el oído seguiría emergiendo detrás del cuadrado, hasta que veamos de nuevo al cuadratojugal incorporarse como la parte más grande de la parte trasera de la cabeza y por ende, el oído quede fuera de la misma. Ese razonamiento es el que lleva a los paleoartistas a "sacar" el oído de la cabeza y situarlo en su margen trasero inferior.


Pero hay un detalle con esto. El hecho de que el meato vaya a dar "por fuera" del cráneo en las aves en esa "rete mirabile auriculare" es simple y sencillamente un artificio, producto de la extraña morfología de la parte trasera del cráneo de un ave. El cuadrado es simplemente muy grande y "estorba" a la salida original del cráneo del meato auditivo, que está ubicada originalmente en contacto con el borde del paraesfenoides. Y de hecho, hay que remover el cuadrado para poder apreciar esta estructura.

En rojo se indica la zona de donde surge el meato auditivo. El cuadrado ha sido removido.

Esto sugiere que en realidad, la posición ancestral del oído externo (o al menos de su base) está asociada a la parte alta de la fenestra temporal superior, justo en la zona de contacto del cuadratojugal (o cuadrado en algunos dinosaurios). Y esto tiene sentido, pues es la posición que también tienen los cocodrilos y no está ahí por casualidad. Está ahí porque es la zona más cercana a la región del neurocráneo donde se aloja el oído medio y el oído interno.

Posible ubicación del meato auditivo externo en un Allosaurus. Y una posibilidad extra (la de abajo).

Eso sí, no se coloca el oído en esta posición, pero ¿por qué? Resulta que si vemos un esquema de la musculatura de un dinosaurio ¡no hay espacio! Los músculos aductores de la mandíbula "estorban". Entonces ¿puede ser que todo este tiempo el oído estuviera fuera de la cabeza, en su margen?

m.a.m.e son los músculos aductores mandibulares externos

No lo sé Rick... Y es que todo el mundo rellena masivamente de músculos la fenestra como si no hubiera un mañana. Pero en realidad...


La cosa es que esos músculos no van tatuados en el margen de toda la fenestra (ni siquiera anclan ahí, sólo están de paso). Y en realidad, hay espacio suficiente para que el oído tenga su salida detrás de la fenestra y cerca del contacto del cuadrado/cuadratojugal con el escamoso.

Posible ubicación del meato. Note cómo está cerca de la caja craneana y el complejo aductor no estorba masivamente como se suele pensar. Digo, no por nada, las fenestras parecen estar "jaladas" hacia atrás, con más espacio del necesario.

Si volvemos a los cocodrilos, veremos que los MAMEs no estorban para nada y que el meato surge de una zona cercana a la caja cerebral y está situado detrás, pero tiene salida por delante, lo cual no es posible en los dinosaurios, de ahí que su salida estaría detrás, en el margen de la fenestra.

Alígator con musculatura resaltada, la encuadrada es el complejo del MAME. En amarillo la zona del canal auditivo.

Además, si lo consideramos la anatomía comparada y al resto de vertebrados terrestres, notaremos que todos tienen el oído incluido en la cabeza y NUNCA fuera de ella.

En rojo, la posición del oído de los dinosaurios.

Incluso, los que no tienen ni fenestras, ni oídos externos poseen esa ubicación DENTRO de la cabeza y nunca fuera.


Así que, bueno, puntos expuestos. Esto no es la verdad absoluta ni mucho menos, es sólo una hipótesis de un loco que le gusta la anatomía y ha disectado vertebrados lo suficiente como para saber dónde está el oído de varios. Estará en cada quien analizar la información presentada y decidir cómo proceder. Por mi parte los dejo con este bonito dinosaurio orejón.

Obra de Midiaou Diallo. Note cómo el artista eligió colocar el meato en la parte de abajo de la fenestra.


Fuentes:

◘ Shute, C. C. D., & Bellairs, A. D. A. (1955, February). The external ear in Crocodilia. In Proceedings of the Zoological Society of London (Vol. 124, No. 4, pp. 741-749). Oxford, UK: Blackwell Publishing Ltd.

◘ Baumel, J. J. (1993). Handbook of avian anatomy: nomina anatomica avium. Publications of the Nuttall Ornithological Club (USA). no. 23.

◘ Witmer, L. M. (1990). The craniofacial air sac system of Mesozoic birds (Aves). Zoological Journal of the linnean Society, 100(4), 327-378.

◘ Holliday, C. M., Tsai, H. P., Skiljan, R. J., George, I. D., & Pathan, S. (2013). A 3D interactive model and atlas of the jaw musculature of Alligator mississippiensis. PLoS One, 8(6), e62806.


ANEXO.

Han notado que en los ceratópsidos existe esa "ventanita" aparentemente inservible (sus MAMEs pasaban por encima del cráneo (hacia la parte baja de la gola) y la ventana es completamente inútil como zona de inserción de MAMEs.


Esa ventanita es ni más ni menos que la fenestra temporal inferior y adivina qué huesos la bordean... Exactamente, el escamoso y el cuadratojugal. Los mismos que delimitan el oído. Y adivinen ¿dónde ponen los oídos en las reconstrucciones? Sí, tristemente fuera, casi en el cuello del animal.


sábado, 4 de mayo de 2019

¿Es serpiente, culebra o víbora?

Hace poco vi un meme que me llamó la atención. Es este:

Momazo paintero.

En él, vemos que dice pictográficamente "te BOA besar" (te voy a besar, para los que no hablan centennial). Y me llamó la atención que en los comentarios de la imagen decía "te pitón besar", "te serpiente besar", "te culebra besar" o "te víbora besar". Y es que casi todo eso está mal. Si bien uno no es responsable de saber diferenciar una boa de una pitón, sí que es importante saber cuándo usar las palabras "serpiente", "culebra" y "víbora".

Boa constrictor.

SERPIENTE.
Es la más inclusiva de todas, pues su uso aplica para designar a cualquier miembro de un grupo taxonómico formal llamado "Serpentes" (sí, serpentes, no está mal escrito, está en latín). A éste pertenece cualquier ofidio viviente, pero no algunos miembros extintos, como Tetrapodophis amplectus del Cretácico, que tenía cuatro patitas.

Tetrapodophis amplectus, un ofidio, sí, pero no una serpiente. Ilustración de Julius Csotonyi.

Dentro de las serpientes tenemos muuuchos grupos, que por ahora no vale la pena detallar, cada uno tiene sus nombres comunes propios, muchos de ellos son transliteraciones de sus nombres científicos. Por ejemplo, un elápido es cualquier miembro de la familia "Elapidae". Pero casi nadie usa ese término (salvo los biólogos).

La cobra, una serpiente que además, es un elápido.

Nombres de familias que sí se usan como nombre común son:

CULEBRA
Se refiere a cualquier miembro de la familia "Colubridae". Las culebras son en su mayoría no venenosas, aunque como en casi todo, hay excepciones y para explicar bien eso, necesitamos muchos más renglones o bien, un buen video en Palaeos de YT. En fin. Entonces decirle "culebra" a un pitón, una boa, una coralillo o a una cascabel es un error, pues NINGUNA de esas serpientes pertenece a la familia de las culebras. Y son en cambio (en orden), un pitónido, un bóido, un elápido y una...

Una bonita serpiente, que además, es una culebra.

VÍBORA
Se refiere únicamente a los miembros de la familia "Viperidae" y a ninguna otra serpiente. Los vipéridos o coloquialmente, las víboras, poseen un par de afilados y largos colmillos en el frente del hocico que son retráctiles, condición que ninguna otra serpiente posee exactamente igual.

Trimeresurus subannulatus, una serpiente, que es una víbora.

Algunas víboras pueden desarrollar cascabeles en las colas, específicamente las del género Crotalus. A quienes a veces, se les refiere únicamente como "cascabeles" o "serpientes de cascabel" o "víboras de cascabel", todos ellos términos correctos. Pero jamás podrán ser "culebras de cascabel", por ejemplo.

Serpiente de cascabel o víbora de cascabel.

Y para finalizar, un resumen gráfico:

Todas estas son ofidios, pero sólo las que están dentro del cuadro azul son serpientes y dentro de ellas hay varios grupos, destacando a las víboras y culebras, como nombres comunes de las familias Viperidae y Colubridae, respectivamente. Ilustraciones de Satoshi Kawasaki.