En 2012 se publicó un estudio acerca del patrón de coloración de las alas de Archaeopteryx. Los autores de dicho artículo presentaron evidencia de melanosomas (orgánulos celulares que contienen melanina, el pigmento más común en animales) en las plumas de cobertura de Archie. Estos melanosomas sugieren además, una coloración en negro para este dino-ave de hace 150 millones de años. A dicho estudio le hizo falta estudiar más secciones de una pluma de cobertura de Archie y además, le faltó estudiar la densidad de los melanosomas en cada región para indagar sobre la diferencia de tonos en una única pluma. Estos faltantes hubieran requerido mucho tiempo y dinero, por lo que no fueron llevados a cabo.
Derecha, pluma solitaria de Archaeopteryx. Arriba, acercamiento de la zona señalada, en escala de grises (izquierda) y con luminiscencia (derecha). Abajo, fotografías con Microscopio electrónico de barrido de la zona indicada en la pluma solitaria. Las flechas indican melanosomas. Barra de escala en la pluma solitaria de 5 mm, en las imágenes de arriba 500 µm y en las imágenes de abajo, 1µm. Tomado de Carney et al. 2012.
Estos inconvenientes fueron superados en un nuevo estudio publicado este mes. Los autores abordaron el problema desde otra perspectiva. En vez de usar microscopios electrónicos para observar melanosomas en pequeñas áreas, decidieron usar un sincrotrón para buscar elementos (azufre, fósforo, cobre y níquel) que revelan el patrón de color de una pluma. La escuela tradicional del estudio fósil indica que estos químicos originales se perdieron de la pluma hace mucho tiempo. Sin embargo, los autores del estudio apuntaron alto y dieron en el blanco, pues demostraron que estos químicos si se conservan y que son útiles para reconstruir el patrón de coloración, usando de referencia los colores que indican los melanosomas.
Pluma solitaria de Archaeopteryx en A) luz visible e imágenes en falso color de B) cobre, C) níquel, D) sulfuro orgánico y D) sulfato. F) Restauración artística de color real. Tomado de Manning et al. 2013.
Sabemos ahora que en el caso de Archaeopteryx, sus plumas remeras eran de un color negro, pero con un aumento de tono hacia el margen externo y la punta. Por ello, las plumas remeras de Archie deben ser reconstruidas como negras hacia la punta y borde, pero grises en el resto de su superficie. Este estudio con rayos X ha demostrado ser una herramienta valiosa que no pone en riesgo la integridad de las delicadas plumas fósiles que estudia. Además, resulta ser un complemento que desde hoy, debería ser necesario para toda reconstrucción científica del color de las plumas de los dinosaurios.
Restauración artística del verdadero color de las plumas del ala de Archaeopteryx. Imagen propiedad de la Universidad de Manchester.
Archaeopteryx es uno de sólo tres dinosaurios de los que conocemos su color real, algo impensable hace tan sólo una década. Esperemos que más estudios de este tipo le devuelvan el color a los dinosaurios y que ahora los niños los puedan colorear adecuadamente en sus libros de iluminar.
FUENTES:
Carney, R. M., Vinther, J., Shawkey, M. D., D'Alba, L., & Ackermann, J. (2012). New evidence on the colour and nature of the isolated Archaeopteryx feather. Nature Communications, 3, 637.
Manning, P. L., Edwards, N. P., Wogelius, R. A., Bergmann, U., Barden, H. E., Larson, P. L., ... & Sellers, W. I. (2013). Synchrotron-based chemical imaging reveals plumage patterns in a 150 million year old early bird. J. Anal. At. Spectrom.
Hola Roberto, ¿cuales son los otros dos dinosaurios de los que se sabe su color verdadero?, gracias.
ResponderEliminarHola
EliminarAhora son tres: Sinosauropteryx, Microraptor y Anchiornis.
SALUDOS